viernes, 29 de septiembre de 2017

Cataluña y las marionetas en la cuerda

Las clases dirigentes siempre manipulan los sentimientos de sus pueblos respectivos. Da igual del bando que sean. Ellos siempre ven el lado práctico de la vida, animan a que otros rompan su cabeza con el muro para dejar un hueco por donde ellos logren pasar. Si las cosas se ponen muy mal es posible pactar una retirada, pues entre las élites procuran no pisarse el rabo. Hoy, por ti, mañana, por mi.


Los políticos están fomentando un nacionalismo español que odie a los catalanes y, a la inversa, un catalanismo radical que aborrezca a los españoles. Los que dan alas a estas formaciones saben que, en última instancia, lo que se mueve es el dinero. Emociones y sentimientos prefabricados para llegar a un buen entendimiento económico.

Pedir independencia para lograr más pelas y un no ceder al chantaje para estar dispuesto a dialogar. Sin embargo, no repruebo esta medida de negociación. Es más, me parece la correcta. Lo que no apruebo moralmente es inflamar estados de ánimo y que los tontos de "aquí" y "de allí" no vean quiénes reparten los naipes.

Las declaraciones de Luis de Guindos

El Ministerio de Economía ha salido al paso de las dudas generadas tras la entrevista del ministro Luis de Guindos en el programa 'Els matins' de TV3. El organismo ha precisado en un comunicado que Guindos "no ha abierto la puerta a un cupo similar al del País Vasco y Navarra como informa hoy de manera errónea el diario Expansión".

En particular, el titular de Economía se refirió a un nuevo "sistema de financiación autonómica que tenga en cuenta las características específicas de los diferentes territorios". El Ministerio recuerda que Cataluña forma parte de las comunidades acogidas al régimen común y está llamada desde la última Conferencia de Presidentes a sentarse a negociar el nuevo modelo.

Lo mismo que con Franco, si desmienten algo es una realidad casi certera.

miércoles, 20 de septiembre de 2017

El terremoto de México o cuando el mal proviene del cielo

Hoy, en medio de la conmemoración de los 32 años del terremoto que sacudió la capital mexicana y que dejó más de 10.000 personas muertas, un terremoto de 7,1 grados sacude nuevamente Ciudad de México en una trágica coincidencia. Esta noticia ha vuelto a remover en mi cabeza diversas cavilaciones sin llegar a ninguna conclusión. Me explico, cuántas veces - como aprendiz de cristiano - he tratado de buscar un argumento de por qué Dios envía o permite el mal en todas sus facetas y, para mi desgracia, no encuentro respuesta adecuada entre las que he escuchado. La más próxima sería aquella que dice: "no trates de comprender, desde un punto de vista humano, los designios de Dios.


La teodicea, una rama de la filosofía cuyo objetivo es la demostración racional de la existencia de Dios mediante razonamientos y, por tanto, sería una "justificación de Dios". Dicho término fue creado en el siglo XIX por el filósofo Leibniz como título de una de sus obras: 'Ensayo de Teodicea. Acerca de la bondad de Dios, la libertad del hombre y el origen del mal'. Trata de explicar la existencia del mal y justificar la bondad de Dios. Su enfoque optimista al problema del mal, se cree que pudo servir de inspiración para la obra 'Candido' de Voltaire.

La novela satiriza la filosofía de Leibniz, y es un muestrario de los horrores del mundo del siglo XVIII. En Cándido, Leibniz está representado por el filósofo Pangloss, tutor del protagonista. A pesar de observar y experimentar una serie de infortunios, Pangloss afirma repetidamente que «tout est au mieux» («todo sucede para bien») y que vive en «le meilleur des mondes possibles» («el mejor de los mundos posibles»).

Así, desde un punto de vista humano nos preguntamos: ¿si Dios es Todopoderoso por qué permite al Ángel caído y a su ejército de ángeles malignos que persistan en sus fechorías.

Si el mal entre seres humanos es debido al contrato de dos espíritus desencarnados para al encarnarse ayudarse a evolucionar en consciencia, ¿no se podría, mejor, evolucionar haciendo el bien?

Si Dios ha dado al hombre el libre albedrio  como una virtud suprema de Dios ¿por qué deja una bomba atómica en manos de...

Si en su infinito amor, para nuestra salvación, ha permitido la crucifixión de Jesús, yo me pregunto: ¿Por qué la salvación solo puede llegar a través del sufrimiento?

Nunca me gustó Yahvé, ese Dios tirano que enviaba plagas y siempre quise a Abbá (Papá) dispuesto a perdonarnos y no a castigarnos. Siempre, al igual que Machado, canté al Jesús de la Mar (el vivo/de la vida) y nunca quise, ni pude cantar al Jesús del Madero/la muerte.

Lo siento, me falta fe.


'Ojos que no quieren ver', un informe de Save the Children para denunciar la pederastia

Ayer, 19 de septiembre, la ONG Save the Children que dedica su labor a la protección de la infancia en ámbitos muy diversos ha emitido un informe donde demuestra, con datos del Anuario del Ministerio del Interior, que las denuncias por abuso sexual en la infancia han aumentado un 15,8% en 2016. Sin embargo, las administraciones públicas dan la espalda a las víctimas porque de cada 10 procesos abiertos, siete no llegan a juicio y sólo un 30% de los casos judicializados concluyen con sentencia.


Los abusos sexuales en la infancia y adolescencia se sufren con miedo, culpa y, sobre todo, en silencio. Se calcula que entre un 10% y un 20% de la población española ha pasado por ese horror y solo una minoría se ha atrevido a denunciar el caso ante los tribunales por diferentes motivos:

- Falta de confianza en la Justicia. El proceso judicial dura de media tres años y es casi imposible, salvo la declaración del niño, conseguir una prueba que tenga el 100% de fiabilidad. El verdugo cuando realiza el delito lo hace sin testigos, ni cámaras. Así, el juzgado de lo penal rápido da el sobreseimiento al caso.

- Hacerle revivir al niño/a el horror sufrido. Los pequeños deben repetir su declaración hasta cuatro veces y en la mayoría de casos en juicios a puerta abierta y en presencia de los mismos abusadores. Una solución a este problema es la llamada prueba preconstituida consistente en tomar declaración al niño lo antes posible y grabar su testimonio para que posteriormente en su declaración no reviva el trauma de esos abusos.

- Psicólogos forenses que muchas veces no usan métodos científicos en el proceso.

Hay intereses - esto es de mi cosecha propia y no de save the children - en mantener una ley del silencio, en que no aflore la cantidad de mierda que vive nuestra sociedad, aparentemente civilizada. Diecisiete denuncias contra Joaquín Benitez, un profesor de gimnasia del caso 'Maristas de Barcelona' - él mismo testificó ser ciertos los hechos imputados - y de las 17 denuncias, 13 han prescrito ya.

Los estudios demuestran que, generalmente, el abuso en el caso de las niñas se da entre 7 y 10 años y su abusador pertenece al entorno familiar mientras que en los niños se produce entre los 11 y 12 años por parte de un adulto con autoridad, como un profesor, entrenados o monitor.

Para Save the Children la lucha contra los abusos sexuales a menores debe enmarcarse dentro de una estrategia integral que incluya una Ley Orgánica para la Erradicación de la Violencia contra la Infancia que establezca, entre otras, las siguientes medidas:


  • Que se garantice la educación afectivo sexual en la enseñanza reglada y desde edades tempranas.
  • Que se incluya la formación sobre violencia y protección de la infancia en los currículums formativos de maestros, profesores y directores de centros educativos y se dote a todos los colegios de un protocolo de detección y gestión de casos de violencia contra la infancia.
  • Que se cree una Fiscalía específica de violencia contra la infancia y juzgados de instrucción especializados en este tipo de violencia.
  • Que se dé prioridad a la tramitación de los procedimientos de abusos a menores y se incluya formación específica a todos los profesionales involucrados en el proceso.
  • Que se fortalezcan y amplíen los recursos autonómicos de tratamiento y atención especializados y sean públicos y gratuitos.
El diario Público apunta que tras la petición de todos los grupos parlamentarios, el Gobierno se ha puesto 12 meses de plazo para elaborar esta norma. Mi problema es que no confío ni en el Gobieno, ni en sus adlateres. Solo me queda confiar en Dios y, en mi próximo comentario, hablo de México.