La Fundación España Constitucional, a la que pertenecen
exministros como José Bono, Eduardo Zaplana, Marcelino Oreja, Ángel Acebes,
Elena Salgado, Rodolfo Martín Villa o Carlos Solchaga, entre otros, llama a
"la estabilidad política". El Ejecutivo, según estos exmandatarios,
debe estar "por encima de ambiciones personales" y debe garantizar
"la unidad de España, el progreso económico, el desarrollo social y la
regeneración democrática". Felipe González aboga por un Gobierno de PP y
Ciudadanos permitido por la abstención del PSOE.
Rodolfo Martín Villa
Lo de “por encima de ambiciones personales” lo expresan sin
ningún sonrojo. La unidad de España es para ellos llevar una banderita Rojigualda y haber colaborado en una política que ha permitido cientos de casos de
corrupción. Ahora, vuelven al discurso de “regeneración democrática”, pero ¿qué
habéis hecho durante casi cuarenta años?. Son firmes partidarios del desarrollo
social bajando al máximo las condiciones laborales/económicas de los
trabajadores y esperando que Cáritas siga acogiendo en su seno a miles de
personas al límite de la subsistencia. A Felipe González, al igual que al
capitán Garfio, el puño en alto se lo comió un cocodrilo y se hizo realista
liberal/socialista democrático. Es decir, casta pura y dura que ofrece “Más de
lo mismo” y eso que estaba” Por el Cambio”.
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