La cinta se rodó siguiendo los mismos pasos comerciales de comedia romántica que otro taquillazo anterior ‘Las chicas de la cruz roja’. En ambas, la música está compuesta por Augusto Algueró y los temas musicales tuvieron una gran aceptación entre el público. Contó con casi idéntico equipo artístico y técnico, desde los guionistas al plantel de protagonistas (excepto Luz Márquez, reemplazada por María Mahor).
Con un tono coral, se narran cuatro historias paralelas, unidas por la presencia de un misterioso personaje que parece un caballero inglés. Sucede que para solucionar todos y cada uno de los problemas relacionados con el amor, una vez al año, el día de su santo, San Valentín baja a la Tierra para ayudar a las parejas con problemas. Es el caso de cuatro parejas que se verán afectadas de forma positiva por su intervención. Es memorable la última escena en donde el misterioso personaje, que a todos recuerda a San Valentín, patrono de los enamorados, monta en el ascensor de la Torre de Madrid, pero en lugar de parar en el último piso del rascacielos, continúa directo hasta el cielo.
Antonio trabaja en una zapatería y es un fanático del fútbol, lo que disgusta a su novia Conchita. Tampoco marcha bien la relación de Luisa, una romántica que ha sacrificado sus sueños por su novio Manolo, un conductor de autobuses, que sólo ve la parte práctica de la vida. Por su parte, Atenea es una locutora de televisión enamorada de Luis, un compañero que no se da cuenta de nada, y todos los pretendientes de María José, una guapa millonaria, sólo buscan su dinero.
Tema musical de la película interpretada por El Consorcio
Una comedia entrañable y sencilla y que hace uso de las modas de ángeles. Entrañable para los que vivimos aquella época y creo que poco recomendable para las nuevas generaciones.
La película tuvo una secuela, Vuelve San Valentín, rodada en 1962.
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