lunes, 24 de octubre de 2016

Guillermo Tell y las pensiones

Tras desbloquearse la formación de Gobierno, está más cerca la reforma de las pensiones para esta próxima legislatura. Un pacto PP, PSOE, Ciudadanos, UGT, Comisiones y Patronal (el sistema) deberán avalar la reforma en el Pacto de Toledo. Una campaña mediática perfectamente calculada nos ha vendido la idea que no hay dinero - asunto cierto - por unas determinadas razones  -ciertas también -  pero callan por qué se ha llegado a tal punto y las únicas recetas que encuentran son lanzar una flecha sobre la manzana colocada en la cabeza de un jubilado. Hay otras alternativas pero no gustan a los suizos…


Nadie niega que las bases de cotización de los jóvenes son más bajas porque los salarios son más bajos. Esta medida, según economistas célebres y sabios, redundaría en un aumento del trabajo y de la productividad. Aquí pasa como la jerga de José Mota: “Las gallinas que entran por las que salen” y es que se han perdido cientos de miles de empleos por valor “X” que ha sido sustituido por otros cientos de miles de empleos por valor “y” y, encima, en precario. Del concepto de productividad debemos preguntarnos a quién ha beneficiado.

La campaña orquestada nos ha ido preparando a través de diferentes declaraciones, noticias e informes de diversos organismos para vendernos la idea que el sistema es insostenible por diversas causas: la gente vive más años, España tiene un problema demográfico con muchos viejos y pocos jóvenes, etc. Por lo tanto para “mantener el sistema es necesario introducir ciertas reformas”.

Señala Niño Becerra señala: “Va a haber recortes en pensiones y creo que para parar el golpe empezarán por las más altas y luego irán recortando hacia abajo (…). Probablemente ésta sea de las primeras cosas que tengan que hacer: eliminar la paga extra, al menos para las pensiones más altas (…). Pueden sacar viudedad y orfandad (las no contributivas) de la Seguridad Social y llevarlas en los Presupuestos, pero no es la solución. En un año estaremos igual y esto suponiendo que los supuestos de crecimiento se cumplan (…). El Gobierno ahora está vendiendo humo. No creo que se cumpla su previsión de que se van a crear 400.000 empleos el año que viene. En todo caso, los periodistas deberíais preguntarles de qué calidad de empleo estamos hablando.”

Y sigue apuntando el economista catalán: “. Si el consejero delegado de Blackrock, el principal fondo mundial, llama hoy a Mariano Rajoy, Rajoy se cuadra. Los políticos... y el color da igual... han llegado a un punto en el que únicamente son ejecutores de algo que se decide mucho más arriba. En este caso Bruselas, la alta banca... En un país con un billón de deuda pública y un billón cuatrocientos mil millones de deuda exterior da lo mismo quién gobierne, tiene que hacer lo que le dicen que haga. Este año pasado fue un poco elástico porque había elecciones, pero el próximo Gobierno que llegue, da igual quien sea, está absolutamente hipotecado”.

El ejemplo de la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA) sirve para demostrar  que esta realidad es así y, sin embargo, hubiera podido existir otra realidad si Syriza hubiera arriesgado con la vía de Rusia o China . La decisión era muy arriesgada, pero la única viable para salir del pozo. Lo demás será cambiar de nombres o colores la misma “mierda”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario