lunes, 4 de enero de 2016

“China, paraíso de especulación” para Santiago Niño Becerra

Hoy los medios de comunicación destacan la sacudida vendedora que se ha producido en la bolsa de China al descender un 7% el índice CSI 300 (selectivo que recoge el rendimiento combinado de tres centenares de empresas que cotizan en los dos parqués chinos: shanghai y Shenzen) y que podría haber sido mayor si no se suspende cautelarmente la negociación de títulos. Como ya ocurrió en 2015, la oleada de incertidumbre proveniente de China se contagia a los principales índices de Europa, Asia y anticipa una caída en Wall Street.


En el vídeo que muestro en estas páginas, escucharéis al economista Santiago Niño Becerra señalar lo que estaba ocurriendo en China (08/07/15).

“El problema era muchísimo más fuerte que lo que acontecía con el problema de Grecia” y apuntaba lo siguiente: “En menos de tres semanas se ha volatilizado de la bolsa china, tres billones de dólares, una cantidad que equivale a casi tres veces el PIB de España y 90 millones de pequeños inversores están huyendo en desbandada porque han perdido hasta la camisa al pedir créditos para endeudarse en la compra de acciones”.

“Tenemos la imagen de un país que fabrica barato y las empresas van allí a invertir, pero esto ha provocado una burbuja inmobiliaria brutal, una burbuja financiera y una burbuja crediticia. Los bancos concedían créditos a muy bajo interés, el Gobierno aconsejaba los préstamos, las empresas impagaban y no sucedía nada…” .

No obstante, incide que el problema no es Grecia, ni China, ni los países emergentes, el petróleo, etc. Se trata de una “crisis sistémica”. Una crisis que solo se puede abordar “realizando compensaciones y quitas de deuda: el mundo se debe a sí mismo 200 billones de dólares: es absurdo imaginar siquiera que eso pueda pagarse; reconstruir el sistema financiero del planeta; contabilizar los activos de los bancos y compañías de seguros por su valor real; rediseñar el sistema fiscal a nivel planetario y homologarlo, basando la imposición en el gasto según tipo de producto con tipos negativos; instaurar una Renta Básica mundial; dar verdadero protagonismo a los técnicos y eliminar intermediarios que no generan ni añaden valor".

Becerra cree que lo más urgente es el endeudamiento. Para salir lo antes posible de esta situación habría que empezar "por la deuda y la Renta Básica", para comenzar a igualar un mundo que cada vez está más distanciado entre acreedores y deudores.

La especulación nace cuando todos queremos ser ricos y cuando se confunden valor y precio.

                                

No hay comentarios:

Publicar un comentario